En los trabajos de aislamiento térmico y acústico en Granada que realizamos en Cantitec, dos de los materiales de primera calidad que siempre valoramos utilizar son la lana de roca y la fibra de vidrio, conocida esta última también popularmente como lana de vidrio.

Son dos excelentes materiales aislantes, que valoramos aplicar en función del uso que se le vaya a dar, la infraestructura de la vivienda, el entorno y también el presupuesto.

De forma general ambos materiales ofrecen resultados óptimos, pero siempre preferimos ofrecer a nuestros clientes lo que consideramos más oportuno para su caso concreto.

Ante la propuesta de lana de roca y fibra de vidrio, muchos usuarios y clientes nos han preguntado qué diferencias hay entre ambos materiales. No son muchas en realidad, pero a veces sí son determinantes para escoger una u otra.

Principal diferencia entre lana de roca y fibra de vidrio

La principal diferencia que encontramos entre la lana de roca y la fibra de vidrio está básicamente en su creación, de dónde vienen y qué se consigue formar con cada una.

La lana de roca proviene de rocas volcánicas que son calentadas a 1.600 ºC y, como resultado, ofrece unas fibras de lana de gran resistencia.

Por su parte, la fibra de vidrio proviene de hilos de vidrio, que también son fundidos a altas temperaturas para formar una malla de finos hilos, que además también ofrece gran resistencia y aislamiento.

El aislamiento con lana de roca y fibra de vidrio

En realidad, el uso que se le da a ambos materiales es muy similar, dado que sus propiedades también comparten características comunes. Tanto la lana de roca como la fibra de vidrio consiguen un aislamiento térmico y acústico satisfactorios.

El hecho de que se puedan poner indistintamente como aislamiento en fachadas, paredes o diferentes partes del hogar, facilita su elección para cualquier objetivo que se plantee.

Gracias a la alta densidad de los paneles en ambos materiales, el aislamiento térmico y el aislamiento acústico que ofrecen garantizan una mejora de la calidad de vida de los residentes en la vivienda, así como un descenso en la factura energética relativa a la calefacción o al aire acondicionado.

De hecho, ambos materiales pueden ponerse de la misma forma, sin obras de por medio, sin necesidad de un mantenimiento y en un servicio relativamente rápido. Las opciones de colocación para ambos materiales son el insuflado o inyectado en cámaras de aire dentro de las paredes o el soplado en grandes espesores, más adecuado sobre todo en áticos y buhardillas.

Siguiendo con los parecidos, tanto la lana de roca como la fibra de vidrio son materiales incombustibles, de ahí que se utilicen también como recurso para mejorar la seguridad de un hogar ante un posible incendio.

Otras diferencias entre aislamiento con lana de roca y con fibra de vidrio

Si tenemos que identificar alguna diferencia notable más entre el aislamiento realizado con lana de roca y el que aprovecha la fibra de vidrio es que, en casos de requerir un aislamiento acústico más reforzado, la lana de roca suele ofrecer, en la infraestructura adecuada, mejores resultados.

Sin embargo, el presupuesto también puede influir y el material de fibra de vidrio es normalmente más económico que la opción de lana de roca, lo que a la hora de cubrir grandes superficies puede decantar la balanza a su favor.

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